La azucarera comienza hoy la recepción de remolacha, que se alargará hasta el 4 de enero

La Opinión de Zamora

La azucarera de Toro comienza hoy la recepción de remolacha, tras la apertura ayer de las factorías de Peñafiel, por parte del Ebro, y de Olmedo, por parte de Acor. La compañía Ebro ha contratado este año 684.503 toneladas de remolacha de cuota para su molturación en la industria toresana, a lo que hay que sumar la posibilidad de que se tengan que añadir 66.584 toneladas de reporte. Según el último aforo realizado por la fábrica, sin embargo, se estima que la producción alcanzarán las 645.000 toneladas en verde, tal y como ha informado el sindicato Coag a través de una nota de prensa.Los últimos aforos realizados, según la organización agraria, arrojan registros similares a la pasada campaña en cuanto a a polarización y rendimientos en toneladas por hectárea, aunque puntualizan que «la remolacha presenta un muy buen estado sanitario, las expectativas son de mejora de ambos parámetros a medida que avance la campaña». Así mismo, señalan que, «analizadas las cifras y, pese a la dificultad de establecer una comparativa tan prematura dadas las fechas actuales y la posibilidad de mejora que ofrece la campaña si el otoño es favorable, sin embargo, cabe constatar que en principio no se cubrirá la cuota» establecida por Ebro para su molturación en Toro, ya que, «esta fábrica tiene asignada una cuota de 809.432 toneladas.La pasada campaña, según recuerda Coag, Toro tenía inicialmente prevista la apertura el 23 de octubre de 2007, aunque el anuncio de movilizaciones por parte de los trabajadores de la industria, «pese a que finalmente no se produjeron», obligaron a retrasarla hasta el día 25. La campaña finalizó el 9 de febrero de este año habiendo recibido la fábrica 863.264 toneladas líquidas con una polarización media arrastrada de 17,57 grados y un descuento de 10,15 puntos. Así las cosas, la fábrica se mantuvo abierta durante 108 días y la molturación media diaria fue de 7.993 toneladas. Según las estimaciones de la organización agraria, «si consideramos el mismo ritmo de recepción y de no producirse parones de campaña a consecuencia del tiempo, ni trasvases entre fábricas, la actual campaña de se prolongaría hasta el día 4 de enero aproximadamente, es decir, que durará unos 81 días. La contratación de remolacha de cuota ha ascendido en Toro en un 19.75% a causa, según este sindicato, «principalmente de la reducción del precio pagado por la remolacha como consecuencia de la aplicación de la reforma de la organización común del mercado del azúcar, así como debido al alto incremento de los costes de producción y de la mayor competencia del precio de los cereales y oleaginosas», pasando de las 853.038 toneladas de la campaña 1007/08 (sin computar la remolacha complementaria) a las 684.503 toneladas de la actual.La fábrica de Toro recibe la producción de remolacha de Ebro de la provincia de Salamanca prácticamente en su totalidad, tras el cierre de la molturadora que la industria poseía en esta provincia en 2001. Así mismo, recibe la producción de Zamora excepto una pequeña parte que se moltura en Bañeza y en la fábrica de Acor en Olmedo. De la misma manera recibe la producción de parte de las provincias de Valladolid y Palencia.La consejera dice que la reducción de la siembra «no ha sido tan importante»La consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, sostuvo ayer durante el III Congreso Internacional de Bioenergía que la reducción de la superficie sembrada de remolacha en la Comunidad «no ha sido tan importante cómo se auguraba al inicio de la campaña y será directamente proporcional» al cierre de la fábrica de Acor en Valladolid, que implicaba el abandono de 4.200 hectáreas de este tubérculo. Asimismo y tal y como recoge la agencia Ical, afirmó que «se han dejad de sembrar en torno a 8.000 hectáreas , al pasar de las 45.000 del pasado año a las 37.000 de este año». La consejera recalcó, además, que la recogida de remolacha en esta campaña está «ligada» a la reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) y que, por lo tanto, era «necesario» que se produjera una reducción de cultivo. En cuanto a la rentabilidad y producción de las tierras destinadas la remolacha, auguró que es un aspecto que no se conocerá con plenas garantías hasta que se recoge, si bien recordó que el pasado año el rendimiento fue de 85 toneladas por hectárea, aspecto que, como señaló, «ha mejorado en los últimos tiempos gracias al esfuerzo de los agricultores».